Charley Bowers
Sábado en Madrid: La Noche en blanco. El períódico dice que el número de actividades organizadas superó el centenar y que un millón y medio de personas salió a las calles, a pesar de la lluvia, para disfrutar de la fiesta. Las críticas las de siempre: colas infinitas, gente por todos los lados, horas de espera...
Y uno no deja de sorprenderse cuando se encuentra que ha elegido la única actividad en la que lejos de haber cola, asistieron calculo yo que no más de 50 personas. Sí, ahí estábamos nosotros ajenos a la vorágine disfrutando de Charley Bowers en la Filmoteca. Un genio a redescubrir, así se titulaba el programa y qué razón tenía.
Sentados en las butaquitas del infierno, y acompañados de un piano increible conocimos a Charley Bowers. Y...menos mal que fuimos!
Así decía la ficha de Filmoteca:
...Imaginen al conservador de una filmoteca que descubre tres películas mudas desconocidas, interpretadas por un mismo y talentoso actor, de una calidad por encima de la media, de un género totalmente desconcocido, una mezcla de slapstick y animación , comparable a Buster Keaton o Harold Lloyd, pero con una creatividad visual cercana al surrealismo más enloquecido. Sin títulos de créditos, sin el nombre del director o del actor, con sólo un nombre escrito sobre la caja: Bricolo. Misterio absoluto....
Y uno no deja de sorprenderse cuando se encuentra que ha elegido la única actividad en la que lejos de haber cola, asistieron calculo yo que no más de 50 personas. Sí, ahí estábamos nosotros ajenos a la vorágine disfrutando de Charley Bowers en la Filmoteca. Un genio a redescubrir, así se titulaba el programa y qué razón tenía.
Sentados en las butaquitas del infierno, y acompañados de un piano increible conocimos a Charley Bowers. Y...menos mal que fuimos!
Así decía la ficha de Filmoteca:
...Imaginen al conservador de una filmoteca que descubre tres películas mudas desconocidas, interpretadas por un mismo y talentoso actor, de una calidad por encima de la media, de un género totalmente desconcocido, una mezcla de slapstick y animación , comparable a Buster Keaton o Harold Lloyd, pero con una creatividad visual cercana al surrealismo más enloquecido. Sin títulos de créditos, sin el nombre del director o del actor, con sólo un nombre escrito sobre la caja: Bricolo. Misterio absoluto....
Benoit Marcandella
Ese era Charley Bowers. Youtube tenía un pequeño fragmento de uno de sus cortos, no es el mejor ni muchísimo menos, pero es fascinante ver lo que hacía en 1930. Espero os guste.
3 comentarios:
Muy bien, ninotchka. Me han gustado mucho las películas de Charley Bowers, al que no conocía. Hay que decir que no pasaste una noche en blanco, sino en blanco y negro.
J,
Pre-cio-so.
GE-NIAL (me he mantenido despierto hasta el final :)
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